¿Cómo podemos ahorrar agua en el baño?

Con unos sencillos gestos cotidianos podemos ahorrar hasta un 50% de agua, ayudando a cuidar uno de los recursos más preciados de nuestro planeta.

Aproximadamente el 70% de la superficie de la Tierra está cubierta por agua, y, en ocasiones, podemos pensar que el agua es un recurso inagotable. Sin embargo, cada vez más áreas geográficas sufren su escasez. Solo un 3% del total es agua dulce, es decir, apta para el consumo. Por eso es vital hacer un consumo responsable del agua en nuestro día a día.

El agua es la gran protagonista del baño. Por ello, en esta estancia de la casa podemos ahorrar más agua que en ninguna otra modificando algunos gestos cotidianos. Por ejemplo, al tomar un baño podemos gastar entre 80 y 200 litros de agua. Cambiar la bañera por un plato de ducha permite reducir considerablemente el consumo de agua, ya que apenas se gastan unos 30 litros en cada ducha.

Otro gesto común es dejar correr el agua mientras esperamos a que alcance la temperatura deseada. En su lugar, podemos introducir un cubo en la ducha y utilizar este agua más tarde para regar las plantas o fregar el suelo.

Cada minuto que el agua corre, se desperdician hasta 5 litros, de modo que también es importante cerrar el grifo mientras nos enjabonamos en la ducha o nos afeitamos y cepillamos los dientes en el lavabo. Del mismo modo, es importante optar por grifos monomando en nuestro baño, dado que no es necesario esperar a que se mezcle el agua para regular su temperatura.

Igualmente, podemos ahorrar agua en el inodoro. Es conveniente instalar una papelera en el baño a fin de evitar que se arrojen papeles y toallitas, descargando agua innecesariamente. Además, los WC modernos permiten reducir el consumo utilizando media carga o carga completa, con lo que es conveniente optar por la media carga al pulsar el botón siempre que sea posible.

Finalmente, es preciso reparar las fugas en los grifos o en el depósito del WC lo antes posible. Observar de cuando en cuando si los grifos gotean puede ahorrar miles de litros al año.

Siguiendo todos estos consejos para un consumo responsable podemos ahorrar hasta un 50% de agua. Por lo tanto, no solo se trata de hábitos esenciales para cuidar nuestro planeta, sino que también podemos ahorrar económicamente.